Hace ya varios viernes que se ha perdido la sana costumbre de correr en grupo, fue algo que comenzó hace unos 4-5 meses y que por razones que ignoro, se ha abandonado.
Esto hace que los viernes me tenga que plantear las salidas de otra manera, para variar, a primera hora no podía correr por lo que había que dejarlo para el final.
Durante la mañana, el viento ha soplado muy fuerte, lo normal en esta isla vamos; pero curiosamente, a medida que avanzaba la mañana el viento perdía un poco de fuerza para dejarle paso al calor.
A las 13:30 comienzo a cambiarme para correr, de nuevo los mismo comentarios del año pasado: "estás loco", "te va a dar algo",..........etc, es complicado hacer entender a la gente, que cuanta más calor hace, mejor corro, cada uno es un mundo, y mientras beba agua regularmente, el calor no me perjudica.
Mientras el Garmin pilla los satélites chequeo el METAR de Lanzarote, 30ºC, ni una nube, viento de dirección variable a 29 km/h, vamos, el típico día de julio-agosto, sólo que en mayo.
Hoy tenía en mente hacer series, hace 2 días hice casi 23 kms de montaña y voy a ver si las piernas me permiten ir pillando poco a poco esa velocidad que tanta falta me hace, voy a repetir la serie de 6 repeticiones de 800 metros con descansos de 2'30, con un calentamiento previo y posterior.
Debido al viento, voy a hacer circuitos pequeños (cada vuelta son 750 metros) y así tengo sólo el viento en contra unos 350-400 metros..........aquí hay que pensar así, buscar el recorrido que menos te perjudique, o no correr.
Cuando llevo casi 8' trotando como un cochino, me preparo y salgo disparado, viento en contra, el Garmin pita como un loco, no son las pulsaciones, es que voy más rápido de lo previsto, debería ir a 4'45 y voy por debajo de 4'30, freno un poco pero nada, me sale la serie a 4'25, al menos estoy bien, los 2'30 de descanso lo hago trotando un poco y sin perder de vista el agua de vez en cuando le echo un trago.
Para la segunda trato de aflojar un poco, pero nada, pierdo sólo 1 segundo en 800m, la cosa es que me encuentro fenomenal, el cuerpo me pide caña y habrá que dársela, en cada descanso bebo un trago de agua, que al estar al sol cada vez está más caliente.
Al empezar la 4ª disfruto apretando un poquito más y de reojo he visto que iba por debajo de 4'/km, freno un poco que todavía me quedan dos, además las pulsaciones están muy cerca de las 170, aunque recupero pronto en los descansos, cada vez estoy subiendo más de pulsaciones al acabar los 800 metros.
La 5ª repetición es un calco de la 4ª, lo voy notando conforme corro, no tengo ni que mirar el Garmin, sé a qué ritmo voy y me voy a guardar energías para la última, que siempre hay que acabarla más rápida.
Para la 6ª voy controlando las pulsaciones, de 135 en el descanso paso a 176 muy rápido, no abusaré de la velocidad.
Al acabar me encuentro muy satisfecho del resultado, mejor que las series del otro día, eso sí, estoy empapado de sudor, pero la patata vuelve rápido a su nivel de funcionamiento, vuelvo trotando para salir pitando de aquí hasta el lunes.
Y mientras corría como un loco, mis Nimbus 13 cumplían los 600km y ahí están, como nuevas, blanditas blanditas.
Tiempo // Distancia // ritmo medio
| 3:32.2 | 0.80 | 4:25 |
| 3:33.3 | 0.80 | 4:27 |
| 3:31.2 | 0.80 | 4:24 |
| 3:25.9 | 0.80 | 4:17 |
| 3:24.7 | 0.80 | 4:16 |
| 3:19.5 | 0.80 | 4:09 |
Track en Garmin Connect
Lo de los pitidos del Garmin es un coñazo, mejor no programar nada y que programe nuestro controlador central.
ResponderEliminarPues has recuperado muy bien del entrenamiento de montaña, buena señal.
ResponderEliminarA mí el calor me aniquila totalmente, me voy acostumbrando pero todavía sueño con correr un maratón a 14 grados :)