sábado, 27 de octubre de 2012

Calmando a la fiera

26 de octubre

Desde por la mañana algo rugía en mi interior, no era hambre, esa fiera ya estaba satisfecha, era un run run que iba y venía, a veces lo llamo "mono" pero tiene un carácter más fiero, más salvaje, más complicado de controlar; llevaba tiempo dormido.

Una cosa que siento desde que un día me dio por correr, es que si por cualquier motivo me pasaba 3-4 días sin hacer deporte me subía por las paredes, el mono me mataba, me volvía incluso desagradable (bueno, exagero un poco.... creo...), la cuestión es que desde que acabé la Travesía del Río y vi que realmente estaba chungo del tobillo, esa fiera se metió en su jaula y no me molestó, pasaban los días y bueno..... tenía esa sensación de "ganas", ese "mono", pero no era esa sensación de antes, de ahí que la apatía se apoderara de mí y en lugar de estar subiéndome por las paredes, estaba desganado y los días pasaban, para darle más emoción estaba de vacaciones, periodo en el que tenía pensado correr a saco.......... estar de vacaciones sin poder hacer nada ha sido una experiencia......... para olvidar ........ al menos retomé antiguas aficiones que llevaban aparcadas mucho tiempo, algunas de ellas eran mi principal motivación hace años, ahora lo veo desde otra perspectiva, no las disfruto igual pero al menos me han tenido entretenido.

Pero ayer se abrió la veda y claro, la fiera se despertó y volvió a salir ............. me tienta con la bici, la calmo diciendo que no puedo........ mira de soslayo las zapas de trail......... ni lo pienses ........... sólo agua, observo el océano........ habrá que nadar entonces.

La mañana transcurrió rápida, estuve tentado de ir a nadar aprovechando la marea baja pero al final no pudo ser, estaba liado con otra de mis aficiones que al final acabó mal, pero eso es otra historia que será contada en otra ocasión.

Tras la comida tuve un momento de indecisión, tenía pensado ir a nadar y casi voy a decir que mejor mañana cuando algo grita en mi interior, la fiera ruge con todas sus fuerzas, vale vale

Veo que la marea está baja y marcho rumbo a la Playa El Jablillo, mi lugar de penitencia y desahogo; mientras voy caminando hacia el punto de partida veo que está en las mismas condiciones que ayer, marea baja y sin olas............ de lujo ........... entro en el agua y está buenísima, mejor que en agosto........

Permanezco unos segundos tumbado flotando en el agua, tengo el gorro y las gafas en la mano, el Garmin en la otra, floto un rato para pillar la temperatura y disfrutar de este momento..........

Todo listo, pulso el botón del Garmin y siento su sonido añorado y la vibración en la cabeza, inspiro y comienzo a nadar.

Será cosa mía, pero siento que nado mejor, que voy más rápido, estoy más concentrado en las brazadas, aleteo con los pies, siento mi desplazamiento en el agua, veo cómo avanzo rápido mirando el fondo, los peces me acompañan y la señal de los 100 metros suena...... ¿ya?

Sé que voy más rápido, lo noto, la ausencia de oleaje tiene esa ventaja, aprovecho la misma para intentar mejorar la técnica, me concentro en impulsarme y mantengo el ritmo.

Llevo poco tiempo nadando pero es algo que me gusta y mucho, es un alivio el poder calmar a esa fiera interior con esto que además de ser buenísimo para el cuerpo, pienso seguir integrándolo en mi plan de entrenamiento como pieza fundamental, al menos 1 vez por semana......... por ahora la temperatura del agua me lo permite.

Algo pasa con el Garmin, los primeros 300 metros han transcurrido muy rápido, es decir, las lecturas han sido muy rápidas pero la de 400 se hace de rogar y la de 500............. es extraño, al ver el track observo que los tramos de vuelta me los marca más despacio que a la ida.......... he ido llevando casi el mismo ritmo todo el rato, está bien medida la distancia, pero mosquea.

Como no quiero abusar repito la sesión de ayer, 2 series que vienen a ser unos 680m según esté la marea, el último tramo transcurre muy rápido, voy pegado a las rocas y las veo pasar a toda prisa mientras decenas de peces están a mi alrededor........

Toco la arena y me paro, miro el Garmin..... 2.3km/h de media.... sabía que iba más rápido, sonrisa triunfal de felicidad.

Algunos aún siguen disfrutando en el agua


4 comentarios:

  1. Es verdad, qué bien suena el pitidito del Forerunner al empezar un entrenamiento cuando llevas varios días sin oírlo... :) La cafetera recién despierto y el pitido al empezar al correr son los dos sonidos que más echo de menos cuando paro! :)

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    1. Aunque a mucha gente le molesta, ese pitido es a veces nuestra única compañía en muchos kms, ¡cómo no lo vamos a echar de menos! :)

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  2. Bueno poco a poco para ir matando el gusanillo. Lo importante es recuperarse plenamente para seguir abordando retos con garantías de éxito.

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    1. Por suerte desde que al menos puedo nadar estoy llevando esta recuperación de otra manera, espero ya las plantillas para iniciar el proceso de adaptación, tengo mucha ganas de preparar la TransGC :)

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